UN DÍA A LA VEZ

Hola mi nombre es Mirna soy una ciudadana del mundo de origen andino y nacionalidad Venezolana.

Hace un año salí de mi país para pasar unas vacaciones y disfrutar unos días de verano en la ciudad de Nueva York en los Estados Unidos y compartir junto  a mis padres y familiares un tiempo de enseñanza y aventuras. Soy madre de un hermoso varón de 7 años de edad quien ha llenado mi vida de mucha ilusión y otras formas de ver la vida. A través de sus ojos he aprendido a mirar con asombro y respeto los parques, los juegos infantiles y hasta ir de compras.

Cuando uno es madre se convierte  en madre de todos los niños del mundo y la sensibilidad está a flor de piel todo el tiempo. Los colores de ese verano cambiaron de tinte cuando decidí no regresar al país por razones políticas y de seguridad. Muchas cosas pasaron por mi mente, desde no creer lo que estaba pasando a creer que era un mal sueño, donde debía olvidarme de todo lo que un día fui o creí ser para después aventurarme en nuevas propósitos de vida y desarrollar mis talentos para seguir adelante.

Todo giro en base a mi hijo, si él está bien yo estaré bien. Todo ha pasado muy rápido y a veces ajustando cada minuto de vida,  fuimos viendo como todo lo que creíamos saber de la vida desapareció y se transformó y ahora éramos dos migrantes más en una gran ciudad con ganas de vivir una vida de calidad y sin saber por dónde comenzar.

Ser una mujer real en estos días es permitirse encontrar nuevas historias de vida, desaprender hábitos y conceptos predeterminados en tu crianza y abrirte de mente y espíritu a esa nueva vibración que enviaste al universo.

Mucha información en el recorrido, muchos caminos por andar y experimentar. Muchos sentimientos encontrados, emociones de todo tipo, un carrusel de expectativas y una vida por continuar.

En el camino me fui encontrando personas de todo tipo y con muchas historias, anécdotas, situaciones y vivencias. Personas intensas, apasionadas, creativas, amorosas, poderosas, guerreras. Soy bendecida y afortunada de aprender todos los días de ellos y seguir positiva, retándome y aceptando que el tiempo de Dios es perfecto y estoy sumamente agradecida por el ticket de vida.

Podría pasar horas y días escribiendo anécdotas contando las mil quinientas cosas, de todo lo que me ha pasado para llegar donde estoy y no sería corto el cuento, pues madera para cortar tengo mucha jejejeje.

Soy curiosa de la vida, me he atrevido a buscar y vivir los diferentes retos y oportunidades en lo financiero, económico, social, espiritual, sentimental, etc. Experimentar desde viajes improvisados, amores alocados, estudios y hobbys que respalden mi estilo de vida. No todo el tiempo planifique y guie mis pasos: muchas veces lo que se me iba presentado lo iba resolviendo pero llega un momento donde todo conspira para que te sientes y hagas un stop en tu vida y  pienses las formas de hacer las cosas y redirecciones tus pensamientos, sentimientos y actitudes con un firme propósito de servir y ser FELIZ.

Tarde mucho tiempo en aprender que realmente me hace feliz, en saber cómo quiero invertir mi tiempo, como quiero pasar mis días, con qué tipo de personas quiero rodearme y en qué tipo de negocios y emprendimientos deseo aventurarme, crear y apostar.

Son tantas las cosas que pasan a una mujer real, que lo primero que deje fue de lucir bien y tener el control. Acepte mis debilidades, fortalecí mis virtudes, abrí mi mente y accione para cambiar mis resultados de vida de manera de poder vivir la mejor versión de mí. No me dio miedo pedir ayuda y saberme ignorante y vulnerable a los cambios que demandaba el momento.

Me llene de muchos miedos a esa nueva realidad, pero no los alimente, tuve momentos de fragilidad y de impotencia. Sentí que todo me abrumaba, que nada funcionaba en mi vida y que por mucho esfuerzo que hiciera no iba para ningún lado pues no tenía el propósito de mi destino claro. Una vida sin propósito en vacía así este decorada y adornada de mil maneras. Todo lo que esta vacío tarde o temprano termina y se devuelve hacia ti como si no hubiese pasado un segundo de evolución. El tiempo se detiene y quedas frio antes las vueltas que da el destino y todos esos temas inconclusos, situaciones de controversia, regresan a ti para ver si realmente aprendisteis la lección o si te mantienes parado en tu grandeza cuando ella atacan en conjunto.

El concepto de tiempo se diluyo y por un segundo entre en un estado de ansiedad y angustia de pensar que no importa donde estés tu destino te encontrara. Estés listo o no para enfrentarlo.

Hoy día no me permito dar Feedback si no me lo piden, elijo mis batallas y momentos especiales, me rodeo de personas positivas y gente aprendices de la vida y eso me ha permitido llevar las cargas más ligeras y creer que mis circunstancias son solo eso, momentos difíciles y controversiales en tiempos de cambios generacionales.

Mi vida es y será siempre un reto, una aventura, una oportunidad de reinvención. Me permito y elijo amarme y compartir ese amor universal con quienes creen en él. Manifiesto abundancia y comparto mi creatividad a través de mis talentos y no me da pena y mucho menos vergüenza decir que soy felizmente una mujer real de 45 años con el alma desnuda y abierta a ese mundo cambiante lleno de aventuras y bendiciones.

Ahora soy más consciente de mi presente,

Me ubico más en este tiempo,

 Comparto más,

 Me rio más,

 Invento más y

Me atrevo a más.

Y es un placer poder servir….y dar gracias por todo.

Búscame en mis redes como @mirnamezaz

Saludos